Las carteras de ‘Invertir Low Cost’ cumplen doce años

Las nueve carteras para pequeños capitales que propuse en mi libro Invertir Low Cost tienen como fecha de inicio el 31 de marzo de 2006, por lo que ya acumulan un historial de doce años.  En el libro figura la composición de cada cartera y su rentabilidad hasta el 30 de septiembre de 2013. Desde esa fecha han sido actualizadas en mi blog. Los resultados se indican en la tabla siguiente. El año 2006 cubre nueve meses (de abril a diciembre).

En este período de doce años, el IBEX 35 ha dado una rentabilidad con dividendos del 3,10% anual. Pero la referencia más apropiada para las carteras es el IBEX Empresas, un índice que he creado para una mejor comparativa. Está compuesto por las empresas no financieras del IBEX 35, todas con la misma ponderación, e incluye dividendos. Su rentabilidad ha sido del 4,25% anual en el período.

Las carteras más rentables han sido la Fusión, con un 14,27% anual, y la Contrapunto, con un 14,20% anual. La ventaja respecto a la referencia principal ha sido por tanto del 10% anual y respecto al IBEX 35 con dividendos, de algo más del 11% anual. Le siguen la Doble Consenso (12,54% anual), la Término Medio (12,17% anual), la Pragmática (11,37% anual) y la Contrarian (10,43% anual).

La tabla siguiente indica la rentabilidad de las carteras en el período cubierto en el libro (31 de marzo de 2006 al 30 de septiembre de 2013, un total de 7,5 años) y en el período subsiguiente (30 de septiembre de 2013 a 31 de marzo de 2018, un total de 4,5 años).

La carteras Consenso Relativo y Contrapunto han obtenido una rentabilidad anual muy similar en ambos subperíodos, aunque la ventaja respecto a la referencia ha sido menor en los últimos años. La Valor y la Valor Al Alza son las únicas que lo han hecho peor que el mercado en el segundo subperíodo.

La cartera Contrarian, que fue la segunda menos rentable en el primer subperíodo, ha sido la más rentable en el segundo, con una ganancia del 15,57% anual. Es también la única que ha incrementado su ventaja respecto al IBEX Empresas.

Desde la publicación de Invertir Low Cost, las empresas del IBEX 35 han mejorado de forma sustancial sus balances y el índice se ha comportado algo mejor. Cuando tenga lugar un verdadero ciclo alcista, lo más probable es que las ventajas se reduzcan de forma considerable ya que en este tipo de ciclos la calidad queda en un segundo plano.

Invertir en bolsa a partir de 100 € con máxima diversificación, sin apenas comisiones ni impuestos

bmCualquier inversor puede comprar todo el IBEX con una sola operación y a partir de solo 100 €.

El producto que hace posible esto es un ETF, siglas de Exchange Traded Fund, que puede traducirse como fondo de inversión cotizado en bolsa. Se trata de un fondo de inversión gestionado por una entidad financiera que se encarga de comprar los 35 valores del IBEX con la misma ponderación que tiene cada uno de ellos en el índice, de modo que la rentabilidad del fondo sea muy parecida a la del selectivo. La única diferencia se deberá a las comisiones de gestión, que por otro lado son muy bajas. Otra cuestión es el conjunto de comisiones que nos cobre nuestro intermediario financiero por tramitar la compra pero esos costes son cada vez más competitivos.

La tarifa más barata que he encontrado es de 2 € más un 0,04% por operación de compra o venta, sin comisiones de custodia. En este caso, si compramos un ETF por valor de 100 € pagaremos una comisión del 2,04%. Este coste no afectará demasiado a nuestra rentabilidad, por lo que si contamos con 100 € y no pensamos entrar y salir continuamente del mercado, ya podemos invertir en bolsa en un fondo muy diversificado (35 valores) y asegurarnos de que al menos ganaremos lo mismo que el mercado, lo cual tiene más interés de lo que parece, pues la gran mayoría de fondos de inversión se queda por debajo de la rentabilidad del mercado a largo plazo. Por otro lado, mientras el producto no se vende no genera plusvalías imponibles. Los impuestos solo se pagan cuando se vende una participación y se materializan plusvalías.

En este sentido, tienen un tratamiento fiscal menos ventajoso que el de los fondos de inversión porque los ETFs no se benefician del diferimiento de tributación por traspaso de participaciones. Es decir, si se vende un ETF y se compra otro, las plusvalías obtenidas son imponibles mientras que si se vende un fondo tradicional y se cambia por otro, el impuesto sobre las plusvalías se difiere hasta el día en que el partícipe deje de reinvertirlas en otro fondo.

bolsamadrid2La diferencia entre un ETF y un fondo tradicional es que el primero cotiza como una acción, de modo que se puede conocer su precio, así como comprarlo y venderlo, en cualquier momento de la sesión bursátil. Un fondo de inversión, en cambio, suele fijar el precio de su participación una vez al día, debe ser adquirido a la sociedad que lo gestiona y puede tener elevadas comisiones de entrada y de salida. Es posible adquirir un fondo a través de nuestro banco o entidad financiera con la que trabajamos pero en este caso habrá que añadir la comisión de dicha entidad financiera. Así que un ETF es un producto interesante debido a su transparencia, su facilidad de negociación y sus reducidos costes de transacción.

Actualmente hay tres ETFs vinculados al IBEX-35:

  • Acción IBEX 35 ETF
  • LYXOR ETF IBEX 35
  • DB-X TRACKERS IBEX 35 UCITS ETF

La cotización de estos productos puede seguirse en esta página de la web de la Bolsa de Madrid.

Acción IBEX 35 ETF

Fue constituido en junio de 2006. Está gestionado por BBVA Asset Management y el depositario es BBVA.

El folleto de emisión dice que está referenciado al IBEX-35. En la práctica, su referencia es el IBEX-35 con dividendos.

Tiene una comisión de gestión del 0,33% anual y una de depósito del 0,05% anual. Carece de comisiones de suscripción y reembolso.

Paga dividendos dos veces al año, en febrero y agosto.

La inversión mínima es de una participación, que tiene un valor de unos 10 euros, pero a causa de las comisiones es preferible invertir un importe a partir de 100 euros.

Su evolución desde diciembre de 2011 puede verse en el cuadro siguiente. Su rentabilidad media hasta el 30 de septiembre de 2015 ha sido del 7,88% anual mientras que el IBEX con dividendos ha ganado un 8,61% anual. La diferencia es, pues, del 0,73% anual.

Accion IBEX35 ETF

LYXOR ETF IBEX 35

Fue creado en enero de 2006. Está gestionado por Lyxor International Asset Management y el depositario es el banco francés Société Générale.

El folleto del ETF especifica que el producto está referenciado al IBEX-35 con dividendos netos.

Tiene una comisión de gestión del 0,3% anual. Carece de comisiones de suscripción y reembolso.

Paga dividendos dos veces al año, en julio y diciembre.

La inversión mínima es de una participación, que tiene un valor de unos 100 euros

La rentabilidad entre el 31 de diciembre de 2011 y el 30 de septiembre de 2015 queda recogida en el siguiente cuadro. La rentabilidad media en este período de tres años y nueve meses fue del 7,36% anual frente al 7,42% anual que ganó el IBEX-35 con dividendos netos, una diferencia de solo el 0,09% anual, inferior incluso a la comisión de gestión.

LYXOR IBEX ETF

DB X-TRACKERS IBEX 35 UCITS ETF

Es el más reciente, pues fue lanzado en abril de 2011. La gestora es DB X-Trackers y el depositario es el Deutsche Bank.

La comisión global máxima es de un 0,30% anual.

Está referenciado al IBEX-35 con dividendos netos pero no paga dividendos sino que los reinvierte en el propio fondo.

En el cuadro podemos ver que la rentabilidad anual de este ETF ha sido de una media del 7,62%, un 0,20% más que la referencia, a pesar de la comisión anual del 0,30%. Esto probablemente se debe a que el fondo tributa por el impuesto de sociedades como una SICAV, o sea al 1%, mientras que en el IBEX-35 con dividendos netos se considera que el inversor tributa por el impuesto de la renta.

DB X-TRACKERS IBEX 35 UCITS ETF

Conclusión

Acabamos de ver que invertir en bolsa a través de un ETF permite asegurarse una rentabilidad muy similar a la del índice subyacente, en estos casos el IBEX-35 con dividendos, con comisiones muy bajas, incluso inapreciables, y con atractivas ventajas fiscales.

Se trata de un instrumento ideal para cualquier inversor que quiera entrar en bolsa con una cartera ampliamente diversificada sin que el importe de la inversión sea elevado (unos 100 €). lo que hace factible realizar aportaciones regulares a medida que se tienen ahorros disponibles y constituir de este modo un capital creciente en bolsa a largo plazo.