Las causas del desplome de IAG

El día en que se conoció el resultado del referéndum sobre la permanencia o no del Reino Unido en la Unión Europea, el 24 de junio de 2016, la aerolínea IAG, fruto de la fusión entre Iberia y British Airways, perdió un 22,54% en el mercado de Londres. En la bolsa española la caída fue superior, de un 26,86%, debido a la depreciación de la libra esterlina de un 4%.

El mismo día IAG publicó un hecho relevante, que reproducimos a continuación, con su habitual lenguaje algo críptico.

iag 24-6-16

En la nota se afirma que el resultado de la votación no tendrá un “impacto material“ a largo plazo en el negocio de la compañía. Aquí se ha traducido la palabra inglesa “material“ por su equivalente en español pero quiere decir “relevante“ en este contexto.

Seguidamente dice que en el período previo del referéndum, el entorno operativo (o sea, el resultado operativo o de explotación) ha sido peor del esperado. Probablemente, la causa sea la depreciación de la libra esterlina. Cuando la divisa de un país baja, sus ciudadanos son más reticentes a viajar. En abril de este año, la divisa británica acumulaba una caída de cerca del 15% respecto al dólar y al euro desde el verano de 2015, debido al temor por el Brexit (salida del Reino Unido de la Unión Europea). Tras el referéndum, la libra se ha situado en 1,23 euros y 1,37 dólares, prácticamente los mismos niveles que los mínimos anuales.

En el anuncio de resultados correspondientes al ejercicio 2015, IAG esperaba generar en 2016 “un incremento en el  beneficio de las operaciones similar al registrado en 2015“.  No quedaba especificado si se trataba de un incremento en términos absolutos o porcentuales, aunque por el contexto se entendía lo primero. En 2015, el incremento del beneficio operativo antes de partidas excepcionales fue de un 68%, algo difícil de repetir. En el hecho relevante que comentamos, se revela que dicha previsión hacía referencia, en efecto, a un “incremento absoluto“, el cual fue de 945 millones de euros. Lo que dice la nota, pues, es que IAG ya no espera incrementar el beneficio operativo de 2016 (se supone que antes de partidas excepcionales) en 945 millones de euros, lo que habría representado un incremento relativo del 40% respecto a la magnitud de 2015, y rebaja la previsión a un “incremento significativo“. Esto ha creado una notable incertidumbre, reforzada por el aviso de que “IAG actualizará al mercado en su debido momento“. ¿Qué contendrá la actualización? ¿Cuándo la publicará?

Se trata de un profit warning (aviso de reducción de beneficios), que suele provocar fuertes descensos en las compañías de crecimiento, que es el caso de IAG. Pero al mismo se le añade la incertidumbre generada por IAG en cuanto a la magnitud de dicha reducción y el momento en que la comunicará. Esta combinación de factores, más que el propio resultado del referéndum y sus posibles consecuencias, es la causa principal del desplome de la compañía en bolsa.

Sin embargo, hay otro factor a considerar. En otro hecho relevante del día 20 de junio, la compañía anunció una ampliación de capital de cerca de 92 millones acciones para cubrir una conversión anticipada de bonos convertibles. Por otro lado, en noviembre de 2015 IAG lanzó dos emisiones de bonos convertibles en acciones, una a tres años y otra a cinco años, cada una por valor de 500 millones de euros. El precio de conversión se fijó entonces en 13,8088 €, muy por encima del precio actual de las acciones, que es de 5 €, por lo que de momento la conversión resulta improbable. Aun así, es preciso contabilizar 72,4 millones de acciones potenciales que podrían emitirse en caso de que la conversión se llevara a cabo en su totalidad. De esta cantidad se deberían imputar 19,2 millones de acciones potenciales al ejercicio 2016, según las normas contables.

Al final de 2015, el capital social de IAG estaba formado por 2.040 millones de acciones. Por tanto, el número de acciones a contabilizar para el cálculo del beneficio por acción de 2016 podría ascender a 2.151 millones. Supone un incremento del 5,4%, lo que hará que el incremento “significativo“ anunciado en el beneficio operativo no lo sea tanto en términos de beneficio por acción, que es la magnitud que nos interesa como accionistas. Por ejemplo, un aumento del beneficio neto del 15% se quedaría en un incremento del beneficio por acción inferior al 10%.

A pesar de ello, la acción de IAG es una de las pocas del IBEX que no está cara. En 2015, la empresa obtuvo un beneficio por acción de 0,69 €, por lo que su ratio PER es de  7,25. La mayor parte de ese beneficio fue de calidad. Para 2016, el consenso del mercado espera un beneficio por acción de 1,08 €, pero este dato no recoge las revisiones de los analistas ante el profit warning de la compañía. El precio objetivo medio de los analistas supera los 9 €, aunque de nuevo hay que advertir que dicho precio va a sufrir revisiones considerables.

Aquí tenéis un buen análisis de la compañía, elaborado por Mucho Invertir el 24 de junio de 2016: IAG – Análisis Fundamental tras el Brexit.

 

 

7 comentarios sobre “Las causas del desplome de IAG

  • Felicidades por el blog. Aún teniendo en cuenta lo que dices, la bajada ha sido exagerada. Los británicos van a seguir viniendo masivamente a España con o sin Brexit. El turismo se vería afectado por un incremento notable del precio del petróleo o un fuerte parón de la economía y nada de eso está en el horizonte, los beneficios podrán incluso estancarse pero seguirán siendo altos. Y no nos olvidemos que ha bajado más de un 25% pero si corrige lo perdido supondría una subida del 40%. Ya veremos que pasa el lunes pero me parece un valor a tener muy en cuenta. Aunque todo dependerá de si el lunes continua el pánico en todos los mercados…entonces mejor esperar.

    • Hola Miguel
      También opino que la caída ha sido excesiva ya que básicamente lo que ha cambiado en la empresa son unas perspectivas de crecimiento no tan buenas como las esperadas a principios de año. Sin embargo, creo que los gestores deberían ser más claros en sus notificaciones y que no acaban de entender la psicología del mercado.
      Saludos
      Carlos

  • Yo la he estado analizando, de hecho puedes ver, Carlos, el análisis que he publicado, y he entrado el viernes entre tanta caída. Creo que la libra y el Brexit no lo convienen, pero de ahí a un 25%, es exagerado, de hecho barajaba la posibilidad de entrar incluso antes. Por cierto, tus 9 carteras no tienen sentimientos ni psicología, y en casi todas aparece IAG, otro factor a tener en cuenta. Yo no sabía lo de las acciones nuevas, me has dado una mala noticia, pero aún así, creo que está muy barata, y con ROE del 30%, ROIC del 14% y margen neto del 7%, me parecen números excepcionales para una aerolínea, y más a este precio. Por otro lado, lo poco que he oído a Willie Walsh, me parece un tío cuerdo, a diferencia de los Alierta, Benjumea y diferentes elementos que encontramos en nuestra fauna nacional.

    • Hola Mucho Invertir
      Estoy de acuerdo contigo en que se trata de una empresa bien gestionada y que crece a buen ritmo. En efecto, IAG está en la mayoría de las carteras y también está presente en mi índice Invesgrama-60 de empresas europeas de calidad. He visto que comparas el PER de diferentes aerolíneas. Sería interesante saber la calidad del beneficio de cada una.
      Recuerdos

      • Sí, bueno, no he estudiado las empresas de la competencia en detalle, la tabla de la que hablas la cogí de un informe de Bankinter. La única que analicé yo mismo fue IAG. Pero PERs de 1, 2 o 3 veces beneficios no es normal, habrá gato encerrado como apuntas con Lufthansa.

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